Las infografías se han convertido en una estrategia muy valiosa dentro del marketing de contenidos, pues no solo permiten una comunicación más amigable con los consumidores, también son perfectas para difundir mensajes internos.
Cifras de Venggage señalan que el contenido en imágenes interesantes atrae hasta un 94 por ciento más vistas que uno que únicamente presenta información.
Ese es justamente el enfoque de las infografías; aportar información de una forma llamativa, entretenida e incluso divertida para el espectador, con el propósito de que esta sea más fácil de procesar y aprender.
Actualmente, muchas marcas implementan las infografías como parte de su estrategia de social media y comparten este tipo de contenido tanto en redes como en sus sitios web.
Beneficios de implementar infografías dentro del marketing de contenidos:
Considerando que los cambios constantes en el área digital nos han orillado a adaptarnos a los nuevos canales de comunicación, no deberíamos negarnos a aprender a emplear nuevas estrategias de marketing.
Debido a los avances tecnológicos, ya no es necesario visitar una biblioteca para obtener información sobre un tema, ni comprar un periódico para conocer las últimas noticias.
Con la velocidad con la que se comparten los datos, los consumidores ya no tienen tiempo de leer grandes cantidades de texto. Por eso, las infografías se han convertido en un auxiliar para compartir mensajes específicos de forma concreta y llamativa.
El diseño de estas también juega un papel bastante importante. Datos recopilados por Bop Desing indican que 45 por ciento de la imagen de una marca proviene de lo que dice y cómo lo dice.
¿Cómo debe ser la estructura de las infografías?
Antes de iniciar con la estructura y diseño de este tipo de materiales debes recopilar toda la información posible sobre el tema deseado y seleccionar lo más importante. Asimismo, debes sintetizarla lo más que puedas para únicamente elegir lo más importante.
Al igual que una nota para blog, esta debe tener una introducción muy corta sobre el tema antes de pasar al cuerpo. También puedes dividir el contenido en subtemas para resaltar lo más importante.
Incluye datos duros; como cifras, fechas y porcentajes, entre otros recursos que puedan respaldar y comprobar la veracidad de tu información.
Por último, no olvides agregar las fuentes de donde se extrajo la información, pues esta debe ser 100 por ciento verídica, comprobable y emitida por expertos en el tema.
En cuanto al diseño, es preferible que emplees los colores representativos de tu marca para que tus materiales logren distinguirse de los de tu competencia. No dudes en agregar personajes llamativos queexpliquen la información o que la ilustren.
También es fundamental que agregues tu logotipo en un lugar específico. Realiza este paso en todos tus materiales y respeta siempre su espacio. Contar con una guía de estilo de marca te puede ayudar a definirlo.
Una vez hecho todo esto, debes elegir los canales de distribución para tus infografías. Aunque puedes publicarlas únicamente en tu blog, de acuerdo con datos de SEMrush el 94 por ciento de los profesionales del marketing usa las redes sociales para distribuir contenido.
Es importante que no descuides este tipo de estrategia; y que al igual que con el resto de tus contenidos, establezcas y respetes la periodicidad y el medio en el que tus infografías serán publicadas.